Luna de día

Cada vez que te digo adiós veo en tus ojos el reflejo de los mios, mi cuerpo no siente nada que sólo tristeza y mis ansias desaparecen con el sólo hecho de darte el último beso del día.

¿Qué soy yo y qué el amor? Quizás somos dos amigos que se acaban de conocer y que en el corto tiempo de amistad que llevamos, nos comprendemos demasiado bien.

Mi castillo va construyéndose, así como se realizó Roma, lentamente a paso de tortuga y gracias al motivo que sobre mi posas.

Los años nos consumen, los días van pasando, hoy no quiero perder ni un segundo, ni escapar de tus pensamientos, quiero y no puedo, deseando estar a tu lado me doy cuenta de lo duro que es la vida, al no tener tu esbozo matutino que en mi vida alegra.

Cuidado y ternura dos palabras que conjugan en la misma sintaxis del más erudito poeta. Yo no comprendería que sería del mundo sin ti, de mi sin ti, porque si no existirías quizás mi corazón jamás hubiera conocido la gloria.

Hoy puedo mirar más allá de mis sueños porque por ti puedo creer en que ellos se cumplen; tu presencia a mi lado lo corrobora y tu forma de ser lo consolida.

Doy gracias por el dulce candor que me obsequias con cada caricia y con cada beso que me das, vivo por ti mi "Julieta" esperándo aquel día en que lo dejarás todo y nos escapemos muy lejos en un precoz futuro, volando hacia donde nadie nos pueda encontrar.

Porque te amo y tú me consumes, quiero tu vida, déjame entrar,permiteme alojarme en ti, ayudame a soñar y acostemonos juntos hasta dejar de respirar.

TE QUIERO MUCHO Y TE AMO.